Sochi: equipos desplegaron elegancia en pista de hielo

El domingo en Sochi no pasó como un día más. Bien temprano en la mañana de nuestro país, el dominio holandés en las pistas de patinaje de velocidad se sostuvo. A lo hecho por los hombres, obteniendo las tres medallas del sábado, se sumó lo que hizo Irene Wust. Esta dama holandesa de 27 años superó a la checa Sablikova y a la rusa Graf que dio la sorpresa al colgarse el bronce en la competencia de 3000 metros.

En el biatlón, Anastasiya Kuzmina, deportista nacida en Rusia que este año compite por Eslovaquia, hizo historia a sus 29 años al revalidar el oro conseguido cuatro años atrás en Vancouver. La competencia fue en la modalidad sprint 7,5 km y Kuzmina se convirtió en la primera mujer en la historia en repetir el título.

Este martes 11 de febrero, la deportista eslovaca volverá a buscar una medalla al comenzar como líder en la modalidad persecusión de 10 km, nada más y nada menos que 20 segundos por encima de la rusa Vilukhina, medallista de plata en el sprint.

En la primera edición en la historia de patinaje artístico por equipos, el equipo ruso se llevó la medalla de oro, superando a Canadá y Estados Unidos que terminaron por detrás. Esta competencia consistió de ocho rutinas presentadas por hombres, mujeres y parejas mixtas. Los locales se pusieron al público en el bolsillo y también al jurado con grandes intervenciones al ritmo de melodías como “El Lago de los Cisnes”.

Una de las disciplinas más atractivas de los JJOO es el luge. Esta consiste en el descenso en trineo de una pista similar a un “tobogán” a velocidades que superan los 130 km/h. Este domingo tuvo lugar la competencia individual masculina y el ganador fue el alemán Félix Loch que revalidó el título de 2010.

Tras disputar tres mangas, los tiempos acumulados dejaban a tres competidores como favoritos. El italiano Zoeggeler, veterano de 40 años que acumulaba cinco medallas (dos de oro), fue el primero en pasar por la pista y conseguir la mejor marca hasta el momento, asegurando medalla de bronce.

Luego pasó el ruso Demchenko, quien superó lo hecho por el tano y se aseguró al menos la plata, sacándose la espina de Vancouver cuando Zoeggeler lo dejó fuera de las medallas. Por último el teutón no defraudó y bajó la marca clavando el reloj acumulado en 3:27.526 minutos. Los tres medallistas alcanzaron velocidades máximas de 140 km/h en algún momento de la competencia.

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