¿Quiere que Cataluña sea un estado independiente en forma de República? Se trata de una pregunta que muchos tuvieron que responder el 1 de octubre de 2017. A un año del referéndum por la independencia en Cataluña, las repercusiones se ven tanto en la situación política de esa región, hoy más fragmentada que nunca, como en el vínculo con el Gobierno Central. Escuche el análisis desde Barcelona de la economista Magdalena Domínguez.
Hoy, a un año del referéndum por la independencia en Cataluña, analizamos junto a la economista, Magdalena Domínguez, cuál es la situación política de esa región, tras un referéndum que el 1 de octubre fue impulsado por un amplio abanico de organizaciones sociales y partidos políticos.
El 10 de octubre también es una fecha especial. Se cumple un año de la famosa y extraña DUI de Cataluña cuando el entonces presidente, Carles Puigdemont, declaró frente al Parlament asumir “el mandato de que Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república”, para proponer al minuto siguiente que “el Parlamento suspendiera la declaración de independencia y emprender así el diálogo”.
Entre una y otra frase sólo pasaron 8 segundos, y por eso se generaron dudas sobre si efectivamente se había declarado la República. Hoy en día muchos bromean que la declaración duró solo ese tiempo.
En la actualidad, la situación política en Cataluña se encuentra más fragmentada que nunca. La fractura entre JxCat y ERC (los partidos independentistas en el gobierno) acabó con la mayoría independentista en el Parlament.
En tanto, el vínculo entre el Gobierno Catalán y el Gobierno Central de Pedro Sánchez marca que las relaciones están y estarán frías a partir de las declaraciones de miembros del Gobierno y de las decisiones que se toman, entre ellas, el gobierno catalán no fue invitado al foro de la Unión por el Mediterráneo que se celebró el lunes en Barcelona.
Referéndum
Según datos de la Generalitat de Cataluña, hubo una participación del 43% de los habilitados a votar, poco más de 5,3 millones de habitantes. De quienes votaron, un 90% votó a favor, y un 8% en contra.
Sin embargo, lo que probablemente más se recuerde de ese día son los incidentes registrado. Una jornada que se caracterizó por una fuerte intervención policial que terminó con varios heridos. Las cifras contabilizan casi 900 civiles atendidos por las emergencias médicas y poco más de 400 agentes policiales.
Hasta el día de hoy, el Partido Popular (que estaba en el poder en ese entonces) sostiene que las medidas fueron proporcionadas. El resto de los partidos políticos españoles desaprueban las cargas policiales de ese día.
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