El viernes se dieron a conocer las últimas cifras oficiales sobre el estado de las cuentas públicas en Uruguay. ¿Qué tan delicada es la situación? ¿Qué alternativas hay? Se lo preguntamos al Cr. Marcos Soto. Escuche el análisis.
Se dieron a conocer las últimas cifras oficiales sobre el estado de las cuentas públicas en Uruguay. En diálogo con el programa Fuerte y Claro de Radio Informarte, el Cr. Marcos Soto, socio de la consultora CSC Uruguay e integrante de la Dirección Académica de la Escuela de Negocios de la Universidad Católica analizó la situación para entender qué tan delicada es, y qué alternativas hay.
Soto explicó los números vinculados al resultado fiscal con doce meses cerrados a julio que muestran un déficit del 2,2% del PBI. Si se le suma el déficit del Banco Central, ubicado en 0,8%, alcanzamos al 3%.
Estas cifras incluyen los ingresos por el fideicomiso de la seguridad social, conocido como efecto “cincuentones”, que se estima en 1,9%. , por tanto, "eliminado este efecto nos encontramos con un déficit consolidado del 4,9%, lo que lo ubica en el rojo más significativo de los últimos 30 años", explicó el contador.
Soto recordó que las cuentas públicas se vienen deteriorando de forma progresiva en los últimos años y han quedado muy lejos de los objetivos del equipo económico. Como ejemplo, señalo que, para este año, se estimaba un déficit del 3,4% y el año entrante de 2,9%.
El contador consideró que "para que la calesita no se transforme en infierno" es necesario trabajar sobre las causas reales del déficit" para lo cual, se debe analizar dos opciones: mejorar los ingresos o reducir los gastos.
Consultado acerca de qué agenda de crecimiento se puede esperar, pensando en pocas posibilidades de maniobra, Soto sostuvo que es necesario mejorar nuestros niveles de competitividad.
Cabe destacar que el último informe de la Asociación de Logística de América Latina ubica a Uruguay como el país más caro para realizar logística (traslado de .producción y mercaderías).
El contador se refirió al Mercosur sobre el cual dijo que "las expectativas comienzan a desvanecerse" a pesar de haberse alcanzado un acuerdo en estos meses y añadió: "Tenemos que pensar que los próximos cuatro años deberán ser de convivencia entre (Jair) Bolsonaro y (Anibal) Fernandez", concluyó.
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