Brasil es noticia, y no por hechos positivos, el coronavirus está haciendo estragos en la población de aquel país, la economía lo sufre, y “debe ser foco de atención y preocuparnos”, dijo el Cr. Marcos Soto, socio de la consultora CSC Uruguay y Director de la Escuela de Negocios de la Universidad Católica, en su columna en el programa Fuerte y Claro. Escuche el análisis.
Soto dijo que ante el peso de los hechos tiene la “sensación” de que Brasil “está en caída libre, y por su relevancia debe ser foco de atención y preocupación para los uruguayos”.
Esta sensación se basa en varios hechos concretos: “La propagación del coronavirus en un país vecino, algo que indudablemente es un tema que preocupa, sumado a tener una frontera muy permeable”.
Además “hay factores que agravan la tragedia humana que se está viviendo. Por un lado creo que ha habido errores políticos, un Gobierno que se ha debilitado. Ha perdido en el último mes a dos ministros de salud, sumado a la renuncia del ministro Moro, que era uno de los pilares del gobierno de Bolsonaro”.
Y este escenario repercute en la economía porque “Brasil no escapará a la recesión que atravesarán la inmensa mayoría de los países. Lo relevante hoy por hoy ya no es no caer en recesión sino mitigar el cómo se atraviesa la tormenta y como se mitiga la profundidad de la caída”, sostuvo.
“En ese sentido Brasil va a caer más que el promedio del continente, y por supuesto más que el promedio mundial este año. Con datos actualizados a hoy, la caída del nivel de actividad del país estaría en 5,89%, eso es lo que espera el mercado según la encuesta de expectativas del Banco Central”.
Esas expectativas “se vienen deteriorando semana tras semana, con lo cual no descarto que el deterioro termine siendo algo más profundo. Además la recuperación para el 2021, no está tan clara. Esa recuperación en V de la mayoría de las economías, sería medio renga, porque para el año que viene se espera una recuperación del 3,50% a hoy, es decir la recuperación será débil versus la caída”.
Impactos
En el terreno del impacto que puede tener para Uruguay la situación brasilera, soto dijo que “nuestra economía se ha encarecido de forma notoria con respecto a la de Brasil” lo que “trae una consecuencia inmediata: nuestra producción pierde competitividad en ese mercado, sumado a una retracción del mercado interno en Brasil que tuvo impactos casi automáticos en nuestras exportaciones hacia aquel mercado”.
“Brasil no es solo destino de nuestras exportaciones, también es en algunos rubros competidor, y en mercados claves. Su mejora en la competitividad indudablemente hará que además con su escala, puedan llegar con mejores precios que nosotros”, dijo.
Soto comentó que, mientras nuestras exportaciones a China se han desplomado, “las de Brasil han aumentado, a pesar del coronavirus. Lo cierto es que a Brasil le ha costado muchísimo recuperarse desde la recesión del 2015 – 2016 y esa fragilidad hoy se siente. El panorama no es alentador, situación que nos agrega presión en un barrio que para donde se mire nos trae problemas”, cerró.