El Centro de Investigaciones Económicas (Cinve) lanzó una innovadora propuesta que busca revolucionar el sistema de transporte público en Montevideo y el área metropolitana. El proyecto fue desarrollado en colaboración con la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de la República.
El plan tiene como objetivo mejorar la eficiencia, velocidad y comodidad del transporte, al mismo tiempo que reducir los tiempos de viaje, mejorando así la calidad de vida de los usuarios.
Uno de los puntos más destacados del proyecto es la incorporación de vehículos de mayor capacidad, que podrán transportar hasta 220 pasajeros y que circularán en nuevas líneas estructurantes con paradas subterráneas, pasajes a desnivel y soterramiento de tramos claves como el de 18 de Julio.
La intervención no solo busca reducir la congestión vehicular, sino también mejorar la conectividad entre distintas zonas de la ciudad.
El proyecto se lanzó en un momento clave, ya que el Cinve tiene la intención de generar insumos y propuestas que puedan ser considerados por los partidos políticos en sus plataformas programáticas de cara a las próximas elecciones nacionales.
Si bien el papel de las intendencias es crucial, desde el Cinve señalaron que “la intervención del Gobierno nacional es condición necesaria” debido a los recursos involucrados y la magnitud de las obras.
Varias líneas
Entre las principales intervenciones, el proyecto contempla la creación de dos líneas de alta frecuencia: la línea A conectará Zona América con Ciudad Vieja a lo largo de 23 kilómetros y 41 paradas, con una frecuencia de un vehículo cada dos minutos.
Por su parte, la línea B unirá Plaza Independencia con El Pinar, en un recorrido de 30 kilómetros y 48 paradas, con una frecuencia de cuatro minutos.
El plan incluye también una serie de obras clave, como el soterramiento de un tramo de 18 de Julio, desde Fernández Crespo hasta Plaza Independencia, con paradas subterráneas que contarán con escaleras mecánicas y ascensores.
Esta obra promete aliviar la congestión en uno de los principales corredores de la ciudad.
Además, el proyecto prevé la creación de cinco cruces a desnivel en puntos estratégicos, como Avenida 8 de Octubre y Avenida Italia, intervenciones que permitirán mejorar la fluidez del tránsito en las zonas más conflictivas de la ciudad y asegurar que los vehículos de transporte público puedan cumplir con sus frecuencias de manera eficiente.
La inversión estimada es de 528 millones de dólares para llevar a cabo este ambicioso plan, si bien el costo es elevado, los beneficios en términos de movilidad urbana, reducción de tiempos de viaje y mejor calidad del servicio podrían transformar radicalmente el transporte público en Montevideo y el área metropolitana.