El expresidente José Mujica cuestionó a quienes, según él, “armaron toda una novela con una frase” de su esposa, Lucía Topolansky, en relación al pasado reciente. El comentario se refiere a las declaraciones de Topolansky incluidas en el libro Los Indomables, de Pablo Cohen, donde afirmó que hubo personas que “mintieron” ante la Justicia para lograr condenas a militares acusados de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
Consultado por Búsqueda, Mujica aclaró que la frase de su esposa fue pronunciada “hace bastante tiempo” y en el contexto de una entrevista para el libro y criticó que “nadie fue a hablar con nosotros para averiguar un poco más del contexto en el que se había dicho”.
En ese sentido, llamó a interpretar las palabras de Topolansky considerando que aludían únicamente a casos excepcionales.
Mujica defendió el sistema judicial al afirmar que “la Justicia en Uruguay es de lo mejor que puede haber” y destacó que “la mayoría de los que han ido a declarar por causas políticas referidas al pasado reciente han dicho la verdad”.
Sin embargo, reconoció que en toda gran causa existen excepciones y subrayó que Topolansky solo se refirió a esos casos puntuales.
Ante especulaciones de una jugada política detrás de estas declaraciones, el expresidente rechazó categóricamente esa posibilidad.
“Que no se imaginen tantas cosas, que yo hace como seis años que ni voy a la dirección de la 609”, sostuvo, refiriéndose a su actividad partidaria.
Incluso aclaró que no ha tenido contacto reciente con Yamandú Orsi, candidato del Frente Amplio: “Solo lo vi al otro día de las elecciones”.
Con tono enfático, Mujica agregó: “Estoy peleando por mi vida, a meses de cumplir 90 años. Que no me jodan, que me dejen tranquilo. Yo tampoco voy a joder a nadie ni a meterme”.
Procesos judiciales
En otro orden, la Justicia penal de Treinta y Tres procesó con prisión a tres militares retirados: José María Lete, Rogelio Garmendia y Pedro Buzó.
La jueza penal de 1° Turno, María Eugenia Mier, determinó que existen pruebas suficientes para vincularlos con violaciones a los derechos humanos cometidas contra 39 adolescentes en el Batallón de Infantería N° 10 de esa ciudad, en 1975.
Según la sentencia, Lete fue procesado como coautor de delitos de privación de libertad, atentado violento al pudor, abuso de autoridad y lesiones graves.
Por su parte, Garmendia enfrentó cargos por privación de libertad, abuso de autoridad y lesiones graves, mientras que Buzó fue imputado por reiterados delitos de abuso de autoridad contra los detenidos y lesiones graves.
Entre el 12 y el 15 de abril de 1975, los militares detuvieron a 39 adolescentes, de entre 13 y 19 años, pertenecientes a la Unión de Juventudes Comunistas (UJC).
Los jóvenes fueron secuestrados en sus hogares y sometidos a torturas que incluyeron plantones, golpes, submarino, quemaduras y descargas eléctricas, entre otros métodos.
Además, la Justicia militar les retiró la patria potestad a sus padres y les prohibió continuar con sus estudios.