No hay vuelta. Pasan las fechas, pasan los rivales y Nacional les sigue ganando. No le hacen goles y siempre te mete por lo menos dos. Luego de su única derrota en este torneo, lleva ocho triunfos seguidos: cinco 2 - 0, dos 3 - 0 y un 3 - 1. Tremendo.
Lo más curioso -tal vez- es que Nacional no es una aplanadora futbolística ni un ballet hermoso de ver. Tampoco es que ejerza un dominio tan enorme sobre los otros equipos. Simplemente les gana.
Les gana, como le ganó este sábado a Fénix, por contundencia, por individualidades y por concentración. No mucho más que eso. Pero les gana.
Tan solo bastaron 5 minutos para que los motivos señalados definieran este partido. A los 38 segundos, De Pena tiró un centro al área, hubo una serie de rebotes, ningún capurrense la pudo despejar y Pereiro la empujó. Gol tricolor desde el vestuario.
Instantes después, cayó un centro en el área de Nacional. Cabeceó Pallas, la guinda quedó boyando, los de Fénix no pudieron empujarla, los de Nacional tampoco sacarla y finalmente la agarró Munúa. Entrevero similar al anterior, pero este no entró.
Esa fue la diferencia del partido. Las propuesta de ambos equipos fueron similares, incluso las llegadas a los arcos también, pero uno la metió y el otro no.
Fue valioso lo que hizo Fénix, jugando de igual a igual y, por momentos del primer tiempo, hasta siendo superior. Ligüera estaba fino y hacía jugar, Acosta las corría todas y los laterales subían. Pero faltaba meterla.
Nacional tuvo una sola para aumentar en el primer tiempo, pero Mejía se la tapó a Giménez. Fue de lo poco que hizo Nacional en esa primera parte.
En el complemento mejoraron los tricolores y en varios pasajes estuvieron más cerca del segundo que Fénix de empatar. Una sucesión de toques en el área que nadie pudo rematar, una atajada de Munúa a Boné y un tiro libre de Ligüera que pasó cerca, fueron las únicas chances de Fénix en el complemento.
Nacional tuvo unas cuantas más, ya que aprovechó los espacios de contragolpe y transformó a Mejía en figura. Recién en la hora pudo cristalizar esos espacios y lo liquidó con dos goles más, que hicieron un resultado demasiado abultado para lo que fue el trámite.
Es que Nacional tiene eso que no tuvo Fénix y que no tienen muchos equipos: el tan mentado "punch". Sin que haya sido el mejor partido de Porras y Arismendi, y por lo tanto la batalla en la mitad de la cancha haya sido pareja, a Nacional lo salvó el "punch".
El "punch" es tener jugadores que pisen el área con peligro y que la metan. Casi siempre es Alonso. Esta vez, como otras tantas veces, fue Pereiro el que abrió el camino. No es una receta mágica, pero es una receta que está llevando a Nacional camino al título.
Ficha del partido:
FÉNIX: Luis Mejía; Juan Álvez, Ignacio Pallas, Fabricio Silva; Ángelo Gabrielli, Raúl Ferró, Andrés Schettino (63' Jorge Zambrana), Silvio Dorrego (45' Facundo Boné); Aníbal Hernández, Martín Ligüera; y Franco Acosta (78' Cecilio Waterman). DT: Gustavo Bueno
NACIONAL: Gustavo Munúa; Santiago Romero, Rafael García, Diego Polenta, Alfonso Espino; Gonzalo Porras, Diego Arismendi; Henry Giménez (65' Sebastián Fernández), Gastón Pereiro (81' Maximiliano Calzada), Carlos De Pena; e Iván Alonso. DT: Álvaro Gutiérrez
Goles: 0' Pereiro (Nacional), 87' Alonso (Nacional) y 90' Fernández (Nacional)
Amarillas: Hernández y Acosta (Fénix); Polenta (Nacional)
Jueces: Darío Ubriaco, Gabriel Popovits y Sergio Freire
Estadio Centenario
Fuente y foto: Por Decir Algo