La situación es en respuesta a la empresa Ecolat, perteneciente al grupo peruano Gloria, la cual inició una reestructura que, dicen los trabajadores, afecta a más de 100 empleados.
Con la reestructura, Ecolat limita su operación a las líneas de producción de manteca y leche larga vida (UHT).
Según informa el sindicato, ante la postura asumida por la empresa, y en caso de no haber cambios, el desarrollo del conflicto es inminente.