“La Copa ya no es mi obsesión. Tengo otras prioridades muchos más realistas como tener continuidad y recuperar nivel. Siento que pinché. Se me fue el pelotón a varios minutos. Ya ni la caravana veo, pero no abandono”, dijo el jugador a Ovación.
Consultado sobre el rol de Diego Godín liderando la defensa uruguaya, Lugano opinó: “Él ya era capitán desde antes de agarrar la cinta. Capaz que mi presencia lo opacaba un poco, pero siempre tuvo su influencia. Fue fundamental en todo lo que pasó y sin dudas lo será en el futuro”.