Luego de ganarle a Atenas y de mostrar signos de recuperación, volvieron a tropezar y a sembrar muchas dudas en sus hinchas.
De entrada, los tricolores salieron a esperar a Wanderers. Paraditos atrás de la pelota y esperando a robarla para salir rápido de contra. Un planteo válido que le había dado resultado en el Apertura, y que también le dio bastantes buenos dividendos este sábado.
Porque Wanderers tocaba la pelota entre sus zagueros, pero no podía ingresar a la nutrida mitad de la cancha de Nacional. Además cometía algunos de los errores que Nacional esperaba y le daba de comer a los delanteros rivales.
Nacional tuvo así algunas chances de gol, pero no las definió bien. A Wanderers le costó y recién generó la más clara con un desborde de Alex Silva, que terminó con una floja definición de Riolfo.
Lo que cambió el trámite fue, obviamente, un gol. Albarracín arrancó notable por derecha, dejó pagando a Espino y se la cedió a Bellini. El 9 bohemio aguantó la guinda, se fue contra la banda y ahí fue fouleado por Polenta. Foul muy dudoso, hay que decirlo.
De ese tiro libre, Albarracín ejecutó el centro que cayó en el segundo palo y que Matías Santos, increíblemente poco marcado, la empujó a la red. Era el 1 - 0 bohemio.
Bastaba eso, un gol de Wanderers, para que Nacional volviera a desnudar sus carencias. Primero que nada, carencias emocionales, ya que algunos jugadores (Arismendi, sobre todo) perdieron el norte; y también carencias futbolísticas, para encontrar el gol del empate.
Nacional tenía que salir a matar en el segundo tiempo y así lo hizo. De Pena, de flojo primer tiempo, creció en el complemento y fue insoportable con sus desbordes por izquierda. A veces culminó mal y a veces culminó bien. Las veces que lo hizo bien, dejó a Alonso de cara al gol, pero este se los "comió" abajo del arco.
Burián, siempre seguro, cortaba cada centro y contenía cada pelota que amenazara con meterse. Con él como pilar, más un Paulo Lima exhuberante tapando agujeros y el oportuno ingreso de Quagliotti, Wanderers aguantó el resultado.
Y no se quedó ahí. Además de aguantarlo, intentó ampliarlo. ¿Cómo? Jugando de contragolpe y aprovechando las enormes estancias que dejó Nacional en el fondo. Reymúndez entró muy picante y fue un problema sin solución para Valdés y Polenta, aunque le faltó dar el último toque correctamente.
Recién la última jugada le salió bien al ex Cerro. Luego que Bellini la peinara, ganó en velocidad, dejó parado a Polenta y la tocó al medio para que Gastón Rodríguez la empujara, no sin antes dejar sentado a Munúa con un lindo enganche.
No se olviden de ese nombre que arrancó la jugada: Bellini. El grandote juvenil fue clave en ese rol de pivotear y descargar juego para sus compañeros. Y fue partícipe de los dos goles. Acierto de Arias y gran respuesta del pibe.
Nacional terminó penando y con delanteros que casi no la tocaron, como Gonzalo Bueno. Seguramente no haya merecido perder por dos goles, sobre todo porque tuvo varias chances de gol que falló, pero en el fondo tuvo serios inconvenientes y los pagó caro.
El Clausura se le aleja cada vez más y, aunque en la Anual sigue teniendo una renta apreciable, no puede dormirse ni seguir así, porque se le puede complicar un partido fácil.
Ficha del partido
Wanderers: Leonrado Burián; Alex Silva, Gastón Bueno, Paulo Lima, Maximiliano Olivera; Santiago Martínez, Matías Santos; Nicolás Albarracín (72' Matías Quagliotti), Diego Riolfo (45' Leandro Reymúndez), Joaquín Vergés (75' Gastón Rodríguez); y Santiago Bellini. DT: Alfredo Arias
Nacional: Gustavo Munúa; Santiago Romero, Carlos Valdés, Diego Polenta, Alfonso Espino (63' Gastón Pereiro); Diego Arismendi, Gonzalo Porras; Leandro Barcia, Ignacio González (63' Sebastián Fernández), Carlos De Pena (81' Gonzalo Bueno); e Iván Alonso. DT: Álvaro Gutiérrez
Goles: 31' Santos (Wanderers) y 89' G. Rodríguez (Wanderers)
Amarillas: A. Silva, Martínez y Albarracín (Wanderers); Valdés, Polenta, Arismendi y De Pena (Nacional)
Jueces: Óscar Rojas, Carlos Pastorino y Raúl Hartwig
Estadio Centenario
Fuente y Foto: Por Decir Algo