"Es una decisión muy personal. Si me voy es porque es difícil para mi trabajar sobre la actualidad", indicó el dibujante en una entrevista que mañana publicará el diario "Libération", que alberga la redacción de "Charlie Hebdo" tras el drama.
El dibujante, que entró en la revista en 1992, aseguró que ya no le interesa "el retorno a la vida normal de un dibujante de prensa" y confesó tener un problema de inspiración.
"Libération", por su parte, asegura que en las últimas semanas se han apreciado divergencias en el seno de la revista satírica, que perdió a doce de sus miembros, algunos de los más emblemáticos y representativos, como el director Charb.
Luz aseguró sentirse "fagocitado por mil cosas, el duelo, el dolor, la cólera", pero también "por los medios de comunicación".
El dibujante afirmó que no se marcha por los problemas que atraviesa el semanario, señaló que tras los atentados necesitaba tiempo, pero que no paró por solidaridad con sus compañeros y que ahora se ha convertido en "demasiado duro" seguir.
"No queda mucha gente para dibujar. He tenido que hacer tres portadas de cuatro. Cada cierre es una tortura porque los otros ya no están. Pasar noches de insomnio pensando en los desaparecidos, preguntándose que hubieran hecho Charb, Cabu Honoré, Tignous, es agotador", indicó.
Luz aseguró que considera que hace su trabajo de forma automática y que siente "la angustia de ser malo".
Fuente: EFE