En un tramo de su discurso en un acto público la mandataria habló de lo que fueron todos estos años en los que le tocó gobernar.
En ese sentido, según publica la Agencia EFE, la presidenta señaló: "Este gobierno no permite que nadie le marque la cancha. Ni a Néstor ni a mi nos ha gritado ningún empresario en una mesa. Antes gobernaban otros, que no eran los votados. Ahora no".
"Hasta el último día estaré para trabajar, trabajar y trabajar para seguir cambiando, mientras estemos en deuda con los argentinos", sostuvo al tiempo que agregó: "Argentina es un ejemplo en DDHH".
Al cierre defendió a su administración expresando que Argentina es un país "con ovarios por lo menos hasta diciembre".