"Charlas con abuelas" reducen dramáticamente enfermedades mentales
10 enero de 2017
Un estudio en el que se aplica una simple terapia basada en charlas de pacientes con abuelas y financiado por Canadá está ayudando a reducir de forma dramática las enfermedades mentales en Zimbabue.
Denominada "banco de la amistad", este tipo de intervención ha permitido reducir casos de depresión, ansiedad y otras enfermedades mentales de un 50 a un 14 % en los principales centros urbanos de ese país.
La terapia consiste en colocar dos bancos de madera en clínicas del país africano donde abuelas de la comunidad están disponibles para conversar durante 45 minutos a la semana con individuos que sufren depresión y ansiedad.
El tratamiento dura seis semanas y, mediante sus teléfonos móviles y tabletas, las "abuelas" las abuelas se contactan con especialistas cuando es necesario un tratamiento más específico.
Capacitadas como trabajadoras sanitarias para escuchar y apoyar a los pacientes, las abuelas se han transformado en un valioso instrumento en un país de 15 millones de habitantes que sólo tiene 10 psiquiatras y 15 psicólogos clínicos.
Según el estudio, los pacientes con depresión o ansiedad tratados en los bancos de la amistad, tuvieron tres veces menos probabilidades de volver a padecer síntomas seis meses después de recibir la terapia en comparación con los individuos que recibieron el tratamiento habitual y tuvieron cinco veces menos probabilidades de tener ideas suicidas que las personas del grupo de control.
Por otra parte, el 50 % de los pacientes que recibieron tratamientos regulares siguieron padeciendo síntomas de depresión mientras que para los tratados en los bancos de la amistad la cifra se redujo al 14 %. La reducción fue del 48 al 12 % en el caso de ansiedad.
El 86 % de los pacientes tratados en los bancos de la amistad fueron mujeres, más del 40 % son VIH positivos y un 70 % sufre violencia doméstica o enfermedades físicas.
"Desarrollado durante 20 años de investigación comunitaria, el banco de la amistad empodera a los individuos para conseguir un mejor control sobre sus vidas al enseñarles una forma estructurada de identificación de problemas y búsqueda de soluciones que funcionan", explica el doctor Dixon Chibanda, principal autor del estudio y uno de los fundadores de la red de bancos de la amistad.
Con el objetivo de aumentar la red de bancos de la amistad a 72 clínicas en las ciudades de Harare, Gweru y Chitungwiza, que suman 1,8 habitantes, el Gobierno de Canadá a través de la organización Grand Challenges Canada (GCC) aportó 1 millón de dólares canadienses (740.000 dólares estadounidenses) a Chibanda.
Hasta ahora, más de 27.500 personas han sido tratadas en los bancos de la amistad.
Por su parte, Canadá, a través de GCC, es el país líder en la financiación de programas de salud mental, como el banco de la amistad, en los países en desarrollo.
El doctor Peter Singer, director de GCC, manifestó a Efe que esta terapia puede ser usada en otros países en desarrollo adaptando el programa a las características culturales de cada lugar.
"En los países en desarrollo, el 90 % de las personas con enfermedades mentales no tienen acceso a tratamiento. Necesitamos innovaciones como el banco de la amistad para revertir la cifra y pasar del 10 % de las personas recibiendo tratamiento al 90 %", indicó.
"Si eres pobre en un país en desarrollo, tienes menos del 5 al 10 % de probabilidades de ser tratado de enfermedades mentales o incluso simplemente diagnosticado en el caso de padecer trastornos. Con los bancos de la amistad la cifra sube al 90 %", agregó Singer.
Fuente: EFE