Nuevos estudios científicos señalan que los edulcorantes pueden ayudar a reducir el consumo de azúcar, a controlar los antojos y a bajar de peso.
“La ciencia detrás de los edulcorantes: cuando las evidencias se enfrentan a las políticas" fue el nombre de la 3a Conferencia de la Asociación Internacional de Edulcorantes (ISA) en Londres, en la que se dieron a conocer un conjunto de investigaciones sobre el uso, los beneficios y el papel de los edulcorantes en la dieta.
Un total de 17 expertos reconocidos a nivel internacional compartieron información sobre el papel de los edulcorantes en la dieta y la salud en general.
Estudios recientes muestran que el uso de edulcorantes está relacionado con una dieta de mayor calidad y puede ayudar a la gente a seguir recomendaciones nutricionales para reducir el consumo excesivo de azúcar, según explicó el Profesor Adam Drewnowski, director del Centro de Nutrición y Salud Pública de la Universidad de Washington, Seattle, EE.UU.
"Las evidencias actuales respaldan el hecho de que los beneficios previstos de los edulcorantes son útiles para reducir el exceso de calorías provenientes de azúcares y, como consecuencia, bajar de peso", explicaron los expertos en referencia al control de peso.
En tanto, el Doctor John Sievenpiper, catedrático de la Universidad de Toronto, Canadá, concluyó que los edulcorantes "tienen el beneficio previsto" y aclaró que "no deberíamos esperar que los edulcorantes causen la pérdida de peso por sí solos, sino que pueden ser útiles si se usan para remplazar azúcares, lo que resulta en una reducción de consumo de energía durante periodos lo suficientemente prolongados".
Diabetes
Con respecto la diabetes, los expertos explicaron que remplazar el azúcar con edulcorantes también puede ser una estrategia útil para ayudar en el control de glucosa en personas diabéticas.
“La evidencia de estudios clínicos en humanos confirma que los edulcorantes no afectan los niveles de glucosa en la sangre ni otros índices de glucemia", explicó el Doctor Hugo Laviada-Molina, endocrinólogo clínico y catedrático de la Universidad Marista de Mérida, México.
En tanto, el Profesor Ian Rowland, Catedrático de la Universidad de Reading, RU, concluyó que, aunque se habla con frecuencia del tema en los medios, las evidencias actuales no respaldan que los edulcorantes tengan un efecto adverso en la sensibilidad a la insulina o en la salud en general por el impacto en la microbiota intestinal.
Los expertos coincidieron en señalar que la seguridad de los edulcorantes aprobados ha sido confirmada en repetidas ocasiones por las autoridades regulativas de todo el mundo, como el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios JECFA, la Administración de Alimentos y Drogas de EU (FDA) y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
“Podemos estar seguros de la inocuidad de los edulcorantes actualmente aprobados para su uso en alimentos y bebidas, ya que todos los edulcorantes se han sometido a rigurosas evaluaciones por parte de autoridades de seguridad previas a la aprobación de su uso, lo que resulta en una ingesta diaria admisible", explicó la Doctora Rebeca López-García, toxicóloga mexicana con gran experiencia.
La conferencia finalizó con una acalorada mesa redonda que buscaba abordar el papel de los edulcorantes en la reducción del consumo de azúcar desde una perspectiva de salud pública.
“Al remplazar los azúcares, los edulcorantes pueden ser una útil herramienta de reformulación alimentaria y una forma útil, entre una variedad de estrategias, de controlar problemas actuales de salud pública, principalmente reducción en el consumo de azúcar y obesidad", concluyó el Profesor Peter Rogers, catedrático de Psicología Biológica en la Universidad de Bristol, Reino Unido.