Según informa el diario ABC de España, Margarita falleció a comienzos de este mes y el 15 se celebró su funeral. Asistieron familiares, vecinos y amigos, pero además lo que ella más quería: sus perros.
Patricia, hija de la fallecida, dijo que aparecieron de manera espontánea, "con gesto triste y actitud respetuosa".
Cuando sus restos fueron trasladados a la iglesia, un grupo de perros siguió al coche fúnebre hasta que el cuerpo fue incinerado.