El director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, explicó hoy a la prensa la evolución del caso de Romero, de 44 años, que ingresó el lunes pasado en un hospital con los síntomas del virus, el primer caso registrado fuera de África.
"Es una enfermedad grave. No se puede garantizar nada, pero hay indicios para la esperanza", afirmó Simón, quien se amparó en la confidencialidad sobre el caso solicitada por la familia de la auxiliar para no extenderse en detalles sobre su estado.
El dato para la esperanza lo aporta el hecho de que "la carga viral (en Romero) se va controlando y reduciendo", pero con la cautela obligada que supone que una persona que padece el ébola "siempre está crítica".
Mientras tanto, sigue la investigación del proceso por el cual Romero se contagió, con la hipótesis de que ella misma pudiera haberse infectado de manera fortuita cuando se quitaba el traje de protección, pero el funcionario subrayó que "hay que verificar todo el proceso".
Fuente: EFE