¿Juguetes que espían a los niños?
13 diciembre de 2016
El portal estadounidense "Consumerist" ha denunciado que dos juguetes están escuchando todo lo que sucede en su entorno y almacenando esta información que después podría ser explotada comercialmente.
La muñeca My Friend Cayla y el robot i-QUE, que son fabricados por la firma Genesis Toys, y cuentan con un micrófono y un sistema de reconocimiento de voz, algo que permite que puedan escuchar las órdenes de sus propietarios y responder en función de la locución escuchada, han disparado la alarma en las asociaciones de consumidores.
Se trataría de una función similar a Google Now o Siri en los móviles, sistemas que envían los comandos de voz a los servidores donde son analizados y, mediante la inteligencia artificial, se escoge una respuesta adecuada.
El problema surge porque se entiende que en este caso se trata de información personal de menores de edad, que es registrada y almacenada para ser potencialmente explotada comercialmente.
Se advierte que la información no queda en manos del fabricante sino de otra empresa totalmente ajena que da servicio a los sistemas de reconocimiento de voz.
Al activarse los juguetes por primera vez, el adulto a cargo está obligado a aceptar las cláusulas de privacidad a partir de la cual, las asociaciones de consumidores alertan de la posible explotación de lo registrado no sólo para mejorar su funcionamiento, sino también “para marketing y publicidad”.
A su vez, la cadena estadounidense CBS, además, ha denunciado que la muñeca Cayla lanza constantemente mensajes a los niños publicitando los productos de Disney.