El dirigente de Compromiso Socialista, Unidad Popular, Federico Kreimerman, dijo que el partido político está concentrado en lograr la mayor representación parlamentaria de cara a octubre. Sobre la posibilidad de un balotaje en noviembre, dijo que aunque aún no hay una postura asumida, la UP “no se orienta por la lógica de lo menos malo” y agregó que la idea es plantear compromisos claros sobre temas específicos. Escuche la entrevista.
“El voto a la UP en octubre garantiza el voto de izquierda en el Parlamento. Vamos a hacer lo que decimos que vamos a hacer. De ahí analizaremos cada propuesta pensando en noviembre, venga de quien venga, para saber si se condice con nuestro programa”, sostuvo Kreimerman, entrevistado en Fuerte y Claro de Radio Informarte.
“Primero estamos concentrados en octubre, posiblemente la discusión la demos después porque aun no se pudo hablar de programas porque la campaña viene muy superficial, basada en el dinero, en los jingles y en las caras bonitas” por lo que “se hace imposible discutir programáticamente para saber de quién estoy más cerca y más lejos”, dijo.
Para Kreimerman es importante que la gente sepa que para “enfrentar la realidad del año que viene, que va a ser de ajuste gane quien gane, van a haber compañeros peleando en la calle” y agregó que la UP no pretende “orientar el llamamiento a votar por la lógica del menos malo”.
“Cuando se hace un llamado a que no gane el otro hay un reconocimiento a que su proyecto ya no es el mejor. Nadie se orienta en su vida por la lógica de lo menos malo. Lo que se debe hacer, por ejemplo, es preguntar a los que lleguen a esa instancia qué van a hacer con el contrato de UPM”, dijo.
O sea, “puedo aceptar que el otro es peor, pero la pregunta es por ejemplo qué se va a hacer en temas clave. Esos compromisos los pondríamos arriba de la mesa para definir el apoyo”, cerró.
No es nuevo
Interrogado sobre qué hará la UP con la reforma constitucional de “Vivir Sin Miedo” que impulsa el senador Jorge Larrañaga, Kreimerman dijo que no la apoyan porque “están en contra del proceso de militarización de la seguridad publica”.
“El problema es que existe una continuidad de las políticas represivas del Estado entre lo que ha hecho el FA y lo que propone Larrañaga, porque por ejemplo la Guardia la Republicana ya es una militarización de la fuerza, sumado al PADO. El proceso ya se está viviendo”, indicó.
“Los resultados muestran que ese camino no sirve. Los números que muestran picos de rapiñas, homicidios, etc. Después de años de una política represiva donde aumentaron además la cantidad de presos, el camino se nota que no es este”, manifestó.
“Más allá de los resultados que no fueron buenos Larrañaga no está innovando. Yo me opongo a la militarización, no solo a la reforma sino al proceso que ya se está dando”, dijo.
Kreimerman aclaró que la UP “no ignora el enorme problema de seguridad que vive el país y que los primeros afectados son los trabajadores. Los que no pueden pagar la seguridad son los que terminan modificando sus patrones cotidianos de vida y a ellos es a los que hay que atender”, sentenció.