La tecnología en los más pequeños: ¿la sobre estimulación afecta su desarrollo?

En su columna "Pensadores Natos", la periodista Emma Sánchez-Quiñones nos invita a pensar acerca de un tema sobre el que, quizás, no se le da la importancia que se le debería dar: el daño que los dispositivos electrónicos pueden causarle a los más pequeños.

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Día a día, millones de padres en el mundo permiten a sus hijos desde muy pequeños jugar y distraerse con estos dispositivos ignorando las consecuencias que esto puede traerles a largo plazo en el desarrollo de su cerebro, con la capacidad de generar inclusive, enfermedades.

En los últimos años, ha habido una cantidad notoria de avances tecnológicos cuyos usos trascienden a las nuevas generaciones que acceden a su manejo a edades cada vez más tempranas.

La televisión, los videojuegos, Internet y los dispositivos tecnológicos, tales como el iPad, se han vuelto parte de la vida cotidiana de niños cada vez más pequeños.

Esto conduce a la siguiente pregunta: ¿de qué manera el uso de dispositivos tecnológicos afecta a los niños pequeños?.

Partiendo de la base de que al momento del nacimiento, el cerebro ha formado casi 2.500 sinapsis (las conexiones que le permiten transmitir señales) por neurona, que el número crece a cerca de 15.000 por neurona a los 3 años y con el tiempo va bajando, si durante ese periodo de tiempo dejamos que el cerebro no se desarrolle con naturalidad y dejamos que niños tan pequeños usen estos dispositivos móviles, estamos provocando una sobre estimulación que puede inducir a un déficit de atención.

¿Porqué? Es que, a la larga, serán niños que necesitarán de muchos estímulos en la edad adulta y tendrán dificultad a la hora de concentrarse, además de no tener ninguna capacidad para lidiar con el aburrimiento o la soledad y fomentar su creatividad, ya que tenderán a necesitar que las personas o las máquinas deban satisfacer su falta de motivación.

Las cosas pueden ponerse más difícil a la hora de por ejemplo, enfrentarse a la resolución de problemas debido a que, desde pequeños se les ha educado en que en el momento que ellos estén aburridos o no quieran algo siempre una máquina saciará esos deseos.

España, Estados Unidos, Canadá y Japón están advirtiendo acerca de las consecuencias anteriormente mencionadas ya que el efecto de los celulares en la salud de bebés y niños menores de 5 años puede ser muy negativo e incluso las asociaciones de pediatría están poniendo alertas sobre el uso de dispositivos móviles, sobre todo en los bebés, al que denominan el "chupete electrónico".