En su último día al frente del país, el presidente Luis Lacalle Pou participará este viernes 28 de febrero en la tradicional ceremonia de entrega del pabellón nacional en la Plaza Independencia. Este acto, que se ha convertido en una costumbre desde la primera presidencia de Tabaré Vázquez, marcará el cierre de su administración antes del traspaso de mando a Yamandú Orsi el 1° de marzo.
La entrega del pabellón nacional comenzó en 2010, cuando Vázquez, acompañado por su familia y figuras políticas, recibió los pabellones patrios y pronunció un discurso de despedida ante una multitud.
Cinco años después, en 2015, José Mujica repitió el gesto en un acto cargado de simbolismo y agradecimiento a sus militantes, en 2020, Vázquez volvió a encabezar la ceremonia, que en esa ocasión tuvo un tono más formal.
El pabellón entregado al presidente saliente se ha convertido en un símbolo de la transición del poder.
En el caso de Vázquez, él lo conservó hasta su fallecimiento, momento en el que, por su expreso pedido, fue entregado a su partido político.
Este año, el acto tendrá una particularidad histórica: será la primera vez que el pabellón nacional se entregue a un mandatario que no pertenece al Frente Amplio.
Hasta ahora, la ceremonia había sido protagonizada por presidentes de esa fuerza política, lo que le daba un tono de fuerte respaldo militante.
El acto de este viernes en la Plaza Independencia se espera que sea una instancia emotiva para Lacalle Pou y su equipo de gobierno.
A pocas horas del cambio de mando, el presidente saliente será despedido en un evento que, más allá de lo protocolar, simboliza el cierre de un ciclo político.
El próximo 1° de marzo, Lacalle Pou le pasará la banda presidencial a Yamandú Orsi, dando inicio a un nuevo período de gobierno en Uruguay.
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