Mario Lubetkin asumió como ministro de Relaciones Exteriores y delineó los principales objetivos de la diplomacia uruguaya en los próximos años. Entre sus prioridades mencionó el fortalecimiento del Mercosur, la ratificación del acuerdo con la Unión Europea y una mayor integración con la región. También destacó el rol del país como un “actor de paz” en la política internacional.
Las acciones de la Cancillería, explicó Lubetkin, estarán orientadas a favorecer el desarrollo económico y social de Uruguay.
“Ayudar al crecimiento de nuestro país, tanto social como económicamente, para mejorar la situación de los uruguayos” será un eje central de su gestión, afirmó.
En cuanto al Mercosur, el ministro subrayó la importancia de consolidar el bloque y mantener el compromiso de sus miembros.
“Uruguay debe seguir teniendo una dinámica participación en preservar y mejorar el Mercosur, para que cada día sea más sólido”, sostuvo.
Además, destacó la necesidad de fortalecer las relaciones bilaterales con los países del bloque y avanzar en acuerdos estratégicos con otros socios regionales.
Lubetkin también mencionó la reciente visita del presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, como una señal del respaldo al acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea.
“España, Italia, Alemania. Grandes países con los que tenemos tradiciones históricas serán algunos de nuestros destacados referentes, con quienes trabajaremos estrechamente junto a nuestros socios del Mercosur”, indicó.
Otro punto clave de su discurso fue la necesidad de ampliar el diálogo internacional, Lubetkin destacó la importancia de instancias como la Celac y la OEA para reforzar la cooperación en América Latina y mencionó la invitación del presidente de Brasil, Lula da Silva, para que Yamandú Orsi participe en la Cumbre del Brics en julio.
Según el canciller, esto permitirá profundizar el vínculo con economías emergentes como China, India, Sudáfrica y Egipto.
Por último, Lubetkin reafirmó la intención de Uruguay de ser un actor en la resolución de conflictos globales.
“Un capítulo destacado de nuestra agenda internacional será nuestra capacidad de ser un actor de paz y de pacificación.
Ojalá Uruguay pueda ser un punto de encuentro y facilidades para realidades hoy enfrentadas”, expresó.
También aseguró que la Cancillería seguirá las directrices del presidente Orsi para que el país sea un factor de consenso en el ámbito internacional.