Según informa la Agencia EFE, con ese objetivo, la Congregación de las Misioneras de la Inmaculada Concepción (MIC), a la que pertenece, convocó hoy para el lunes una rueda de prensa, en la que Melgar, acompañada de miembros de la orden y de su ONG (Fundación Signos Solidarios), expondrá su experiencia.
El plasma donado por Melgar cuando estaba convaleciente ha servido para tratar a Romero, sobre la que fuentes medicas informaron hoy que ha experimentado una mejoría y que su carga viral se ha reducido.
El plasma de personas que se han curado del ébola es uno de los tratamientos experimentales autorizados por la Organización Mundial de la Salud.
La monja, quien se contagió cuando trabajaba en el hospital San José de Monrovia (Liberia), decidió exponer su caso "ante la expectación y el interés suscitados sobre su persona en los últimos días para contar su testimonio vital y misionero" y su intención de colaborar con los posibles infectados por el virus, según informó dicha orden religiosa.
Con esta iniciativa, la orden quiere "sensibilizar" a la población acerca de los graves efectos de la enfermedad en África occidental y sobre "la necesidad de colaboración y ayuda para combatir la epidemia".
La monja, de 47 años y quien trabajó junto con el sacerdote español Miguel Pajares, fallecido a causa del virus del Ébola, se infectó junto a otros colegas que trabajaban en la ONG Juan Ciudad ONGD, promovida por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios.
Cuando Pajares y la monja Juliana Bonoha, también de origen guineano con nacionalidad española, fueron repatriados a España para ser ingresados en el hospital Carlos III de Madrid, ambos pidieron que no se olvidará a las personas que, como Paciencia, quedaban en zonas de alto riesgo y con pocos recursos sanitarios.
Melgar consiguió superar la dolencia y, una vez dada de alta en Monrovia, se le pidió que viajase a España para donar su sangre inmunizada al padre Manuel García Viejo, otro sacerdote español infectado por ébola y repatriado desde Sierra Leona.
Al igual que Pajares, García Viejo falleció pocos días después de su llegada a España sin haber recibido el tratamiento a base de plasma obtenido de la sangre de la monja.
Fuente: EFE