"Todo lo que puedo decir es que eran transacciones simuladas, y tuve mucho éxito. Los rendimientos fueron increíbles, mejores que los del S&P", admitió el joven Mohammed Islam en una entrevista con ese diario después del revuelo mediático que generó su historia.
El primer medio en publicarla fue la revista New York Magazine, en la que el estudiante aseguraba incluso que quería crear su propio fondo de alto riesgo al cumplir la mayoría de edad en junio y que confiaba en poder ganar hasta 1.000 millones durante el primer año.
Joven influyente.
"No es verdad", respondió a New York Observer sobre sus supuestas inversiones en los mercados del oro y el petróleo y si había dicho en algún momento que sus ganancias eran de "ocho dígitos", y fue más allá y admitió que todo era una ficción.
Islam, hijo de unos inmigrantes de la región de Bengala que viven en el barrio de Queens y estudia en el prestigioso instituto público Stuyvesant de Manhattan, ha generado tal revuelo que desde entonces sus padres no le hablan.
"Honestamente, mi padre reniega de mí y mi madre dice que nunca volverá a dirigirme la palabra. Sabían que todo era falso y básicamente querían matarme, y desde entonces no he hablado con ellos", añadió el adolescente en declaraciones que publica la Agencia EFE.
El joven, que preside el Club de Inversores del prestigioso centro educativo en el que solo se hacen transacciones simuladas, lamentó todo el daño que haya podido causar con esta historia, especialmente a su familia.
Fuente: EFE