El fiscal especializado en delitos de lesa humanidad, Ricardo Perciballe, respondió con firmeza a las declaraciones de Lucía Topolansky sobre presuntas mentiras en testimonios vinculados a crímenes de la última dictadura. “Si tiene los elementos, que haga la denuncia”, expresó, destacando que los funcionarios públicos tienen la obligación legal de reportar cualquier delito del que tengan conocimiento.
Perciballe afirmó que no hay evidencia que respalde las declaraciones de la exvicepresidenta, quien aseguró en el libro "Los indomables" que existen personas dentro de la izquierda que han mentido en testimonios sobre delitos de lesa humanidad.
“En las causas judiciales no se ha constatado en absoluto lo que se ha manifestado en ese libro”, subrayó el fiscal en declaraciones a El País.
El fiscal también explicó que una víctima que declara como testigo y miente puede incurrir en el delito de falso testimonio, sin embargo, calificó las declaraciones de Topolansky como “la opinión de una persona y nada más”. “No sé en qué se basó para decir eso”, reiteró.
Antecedentes
Lucía Topolansky reafirmó su postura en el libro escrito por el periodista Pablo Cohen, donde mencionó que existen personas dentro de la izquierda que intentaron manipular testimonios para incriminar a militares.
La exvicepresidenta aseguró: “Nosotros sabemos quiénes son los que mintieron dentro de la izquierda, pero no lo vamos a decir”.
Topolansky también recordó episodios históricos, como la discusión dentro del Frente Amplio sobre la ley de caducidad antes de las elecciones de 2004, y reflexionó sobre las diferencias entre las dictaduras uruguaya y argentina: “Acá, si hubieran desaparecido a todos los que estuvimos presos, el volumen hubiera sido otro”, afirmó.
La exmandataria sostuvo que su testimonio en causas judiciales siempre estuvo basado en lo que pudo observar directamente, destacando un caso en el que aseguró que un prisionero murió por una granada de gas, pero la jueza a cargo no consideró su declaración como prueba suficiente.
Repercusiones
La polémica escaló en redes sociales, donde figuras como la exfiscal Gabriela Fossati calificaron las declaraciones de Topolansky como “gravísimas” y cuestionaron la gestión de Perciballe en los casos judiciales.
Cohen, autor del libro, señaló que los dichos de la exvicepresidenta reflejan un conflicto ideológico dentro de la izquierda, especialmente entre el Movimiento de Participación Popular (MPP) y el Partido Comunista del Uruguay (PCU).