En su columna de análisis, en el programa Fuerte y Claro de Radio Informarte, el politólogo Andrés Raggio, explicó que la firma del nuevo acuerdo comercial entre EEUU, Canadá y México, que se concretará en noviembre durante la reunión del G20, se enmarca en el proceso “revisionista” de la política internacional que viene llevando adelante el gigante del norte y en particular el Partido Republicano, en base a la gestión de la administración de Donald Trump. Escuche la columna completa.
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Según explicó Raggio la firma del acuerdo, que por sus siglas en inglés se lee Usmca, cobra valor si se toma en cuenta que, de un tiempo a esta parte, el Gobierno de Trump desarrolló una “política sistemática de abandonar los acuerdos y los organismos multilaterales, que han quedado en jaque gracias a la salida de la que, hasta el día de hoy, es la gran potencia mundial”.
Además el Usmca se concreta “en el contexto de la guerra comercial que está presente con China, una guerra que no está marcada por el superávit o el déficit entre los dos países sino que tiene que ver con la tecnología que las inversiones desarrollan y creo que tendrá, y ya está teniendo, consecuencias muy importantes para EEUU”, expresó.
La perdida
En otro orden Raggio se refirió al fallo de la Corte Internacional de Justicia, adverso a Bolivia, en referencia a su reclamo limítrofe a Chile.
Para el politólogo, a nivel geopolítico “se puede decir sin rodeos que ganó Chile. Se trata de una disputa en la que no volverá a meterse por mucho tiempo, porque cada vez que se la convoque dirá que el tema ya está hablado”.
En Bolivia, agregó Raggio, “no se esperaba perder. De hecho se convirtió en identitario de ese país la necesidad de poseer de nuevo un territorio que se considera propio pero que es ajeno”.
El fallo es “un fuerte golpe político para el Gobierno de Evo Morales, que ya adelanto que no dejará de insistir ante los diferentes organismos y convenciones internacionales” porque “se trató de su buque insignia, un tema de agenda que el Gobierno trasladó a la opinión pública y que, al decir del presidente chileno, Sebastián Piñera, generó falsas expectativas a la gente”, cerró.
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