Tal cual lo anunciara el ministro de Economía, Danilo Astori, el proyecto de Rendición de Cuentas, se dividirá entre los compromisos asumidos y las prioridades del gobierno. Escuche la columna de Marcos Soto.
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En diálogo con el programa Fuerte y Claro de Radio Informarte, el contador Marcos Soto analizó algunos aspectos de la última Rendición de este período.
El jueves 7 de junio, el titular de Economía informó que el Gobierno tiene previsto un aumento de 4.700 millones de pesos en el gasto de la Rendición de Cuentas para el período 2019-2020. De la cifra total 1.700 millones corresponde a “gastos ya comprometidos”.
A ese monto se suman casi tres mil millones destinados a “financiar avances en cuanto a las prioridades políticas” establecidas por el FA en el programa de gobierno.
El contador recordó que el contexto en el que se presenta esta propuesta del Poder Ejecutivo, es en el de una economía mundial recuperándose lentamente, con vecinos (Brasil y Argentina) en situaciones de suma inestabilidad sumado a la preocupación local por la pérdida de empleo.
La tasa de empleo en los últimos años ha caído drásticamente y esto ha provocado un déficit fiscal siempre por encima de la meta del gobierno generando una situación de "margen nulo" de maniobra.
Al respecto, Soto destacó que en esta oportunidad, el ministro de economía optó por resignar la meta fiscal: "Es la primera vez que Astori reconoce que el déficit fiscal se está alejando del compromiso trazado por la administración de Tabaré Vázquez de llevarlo a 2,5%", sostuvo.
Educación
En materia educativa, el secretario de Estado explicó que habrá 2.422 millones de pesos para la enseñanza, que se dividirán en 1.942 millones para la ANEP, 430 millones para la Universidad de la República y 50 millones para la UTEC.
El ministro indicó que la cifra educativa no incumple con la promesa de campaña porque en los hechos se se está superando el 5% del PBI para el rubro educativo, alcanzado en la anterior rendición.
Astori recordó que siempre se habló de “tender” al 6% del PBI y aclaró que la propuesta del Poder Ejecutivo representa la opinión unánime del gabinete.
Al respecto, Soto consideró que "Astori tenía dos grandes opciones: o respetaba su compromiso del 2,5% o priorizaba los compromisos políticos, en particular la educación".
"El ministro optó por fortalecer la educación a costa de mayor déficit", explicó Soto.
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