El futuro presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Álvaro Danza, reveló una situación financiera alarmante en el ente estatal, al afirmar que la deuda actual con proveedores asciende a $4.500 millones. Según el médico, esta cifra es diez veces mayor que los $378 millones reportados al cierre de 2019.
Danza hizo estas declaraciones tras su designación por la próxima ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg.
Danza cuestionó la afirmación de la actual ministra de Salud, Karina Rando, quien había señalado que la deuda era “similar” a la de la administración anterior.
“La diferencia, a priori, parece muy significativa y no suscribo a lo que señaló la ministra Rando, vamos a contrastar con la realidad cuál es esa cifra”, manifestó.
El médico también destacó que este elevado monto será un condicionante para la gestión entrante: “Va a condicionar porque una de las primeras cosas que tendremos que hacer es trabajar con los proveedores para acortar esas diferencias y que sigan proveyendo los servicios al Estado”, explicó.
Entre las prioridades que Danza identificó para ASSE a partir de marzo, mencionó la resolución de problemas críticos, como la falta de medicamentos en diversas localidades, las extensas listas de espera para intervenciones quirúrgicas y consultas con especialistas, además de atender los desafíos en salud mental y de las infancias.
Estos aspectos, subrayó, serán centrales en la nueva gestión, aunque la deuda con los proveedores es una de las primeras alarmas que enciende la administración entrante, reflejando una disparidad importante con el cierre del periodo 2015-2020.
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